¿Por qué se invierte tan poco en cáncer infantil?
A veces las cifras duelen más que las palabras. Porque detrás de cada número hay un nombre, una familia, una historia que no debería haber pasado por esto.
En la Fundación Alba Pérez convivimos a diario con realidades duras, que muchas veces no aparecen en los titulares. Una de ellas es esta: el cáncer infantil recibe muy poca inversión pública para investigación. Y aunque lo sabemos, sigue siendo difícil de aceptar.
Un dato que cuesta digerir
En España, menos del 5% de los fondos públicos destinados a la investigación del cáncer se invierten en cáncer infantil. Sí, lo repetimos: menos del 5%. Todo esto mientras los tratamientos para adultos avanzan a buen ritmo, se prueban nuevas terapias y se multiplican los ensayos clínicos.
En cambio, en oncología pediátrica muchas terapias siguen siendo las mismas desde hace años. A veces, incluso décadas. Y eso, simplemente, no es justo.
¿Por qué ocurre esto?
Existen varias razones, aunque ninguna justifica el abandono. Te explicamos algunas:
Menos diagnósticos, menos prioridad.
El cáncer infantil representa un porcentaje pequeño del total de casos oncológicos. Y eso, desde una lógica puramente numérica, lo relega en los presupuestos.Baja rentabilidad.
La industria farmacéutica, como cualquier otra, busca beneficios. Y desarrollar tratamientos específicos para un público tan reducido no suele considerarse rentable. Por eso, la investigación en cáncer infantil depende, en gran parte, del apoyo público… o del esfuerzo de fundaciones como la nuestra.Falta de visibilidad.
El cáncer infantil es incómodo. Duele hablar de niños enfermos. Duele mirar de frente esa realidad. Y como muchas veces se evita, también se silencia en los espacios donde se toman decisiones.
¿Y entonces, qué hacemos?
No tenemos una solución mágica, pero sí una convicción: la indiferencia no puede ser una opción.
Desde la Fundación Alba Pérez, creemos en el poder de la información, en la fuerza de la sociedad civil y en la necesidad de exigir más. Por eso trabajamos para visibilizar, para informar y para seguir apostando por la investigación científica.
Cada proyecto que financiamos, cada campaña que impulsamos, es una llamada de atención a quienes pueden cambiar las cosas desde arriba. Y una invitación a la ciudadanía para sumar desde donde se pueda.
Porque cada euro cuenta
Donar no es solo un gesto económico. Es una declaración de principios. Es decirle a los niños y niñas que luchan contra el cáncer: “no estáis solos”.
Invertir en cáncer infantil no es un gasto. Es una inversión en vida, en ciencia, en esperanza. Y es también una forma de empujar el cambio que necesitamos ver.
¿Nos ayudas a seguir impulsando la investigación?
Tu apoyo, por pequeño que parezca, puede abrir una nueva puerta en la ciencia.
Descubre más sobre nuestro trabajo en: Fundación Alba Pérez
Cada gesto suma. Cada paso cuenta.